17 noviembre 2006

Ooooso...

Te va ver un amigo. Uno X. Uno que nunca conociste ni bien, ni mal. No lo ves hace años, pero lo viste tan pocas veces antes, que solo te acuerdas de su nombre, de que vive en una comuna cercana y en realidad eso ya da lo mismo. Lo que importa aquí, es que por cosas de la vida te va a saludar. Y se toman unos traguitos. 6 para ser exactos. No importa el número. Y hablan de Radiohead, de Tool, los escuchan y tb a Morrisey, Misfits y otra cosa, no se qué.
En un minuto -en el ante penúltimo exactamente- los líquidos empiezan a llegar de poco a tu cerebro, pero tu crees q llegan a tu corazón y miras al visitante en colores brillantes. Te dices “Como no lo vi antes?” mientras de a poco te bajas el escote, fumas sonriendo (jijiji, jujuju, jojojo), te sientas en la cama, abres los ojos mientras aspiras el humo y entonces cuando (menos) te lo esperabas:

-Ya chiquilla, un gustazo, me voy. Estay boniiiiiiita!- Te piñisca el cachete derecho riendose como tu abuelos (Q.E.P.D) y te abraza apretado.
-… Hem, chhhhh. Cha, chau.