Brindo por...
- Ya te curagüillaste?
- No, mamá.
- Te pegaron?
- No.
- y entonces pq venia así atonta?
- …
- Ya. Tápate, tápate- mientras me acomodaba el plumón.
- Bueenas noshes.
- Viste! veni curagüilla ya!
- Nooo, si guarde plata pa` la micro incluso.
- De donde veni a esta hora? Son más de las 12. Me despertaste!
- Andaba en la reunión con mis compañeros del taller.
- Y te pegaron que veni así?
- …zZzZz.
Me dormí inmediatamente y como a las 5 de la mañana desperte con dolor de cabeza y la sed de un naùfrago, como pude me arrastre a la cocina y afirme mi culo en la mesita para tomar agua como desesperada, recorde el carrete en el barsucho de bandera, las conversaciones, las criticas y los pelabres, como de a poco se fueron yendo y la salita media vacia se hiba llenando de cachondeo para unos y morbo para los demas, las caras deformes por el copete estaba felices satisfechas y yo tb en la cocina mientras buscaba algo que comer en el refri, hasta recorde mi terrible brindis. Como siempre llegue tarde a la junta, ya estaban todos sentaditos y la java ya estaba abierta, pregunte si habian echo el brindis correspondiente a la ultima junta como taller, dijeron q no y q yo hiciera uno - Uff por la boca muere el pez- todos de pie y dije algo asi como:
Hem hum… Bueno salud por el taller, que estuvo súper lindo, por lo menos para mi, y yo creo q para la mayoría. Conocimos distintos estilos y creo q fue muy enriquecedor para todos. Salud!... a los ojos a los ojos. Jajaja
Entre paya y no se que. Se notó q venía recién llegando y me faltaba llenar mis entrañas de ese elixir magico que te suelta la lengua y mas de una vez ha inspirado grandes obras. Como sea, así nació mi primer brindis sin pena ni gloria, en el sector VIP del Wonder Bar.
- No, mamá.
- Te pegaron?
- No.
- y entonces pq venia así atonta?
- …
- Ya. Tápate, tápate- mientras me acomodaba el plumón.
- Bueenas noshes.
- Viste! veni curagüilla ya!
- Nooo, si guarde plata pa` la micro incluso.
- De donde veni a esta hora? Son más de las 12. Me despertaste!
- Andaba en la reunión con mis compañeros del taller.
- Y te pegaron que veni así?
- …zZzZz.
Me dormí inmediatamente y como a las 5 de la mañana desperte con dolor de cabeza y la sed de un naùfrago, como pude me arrastre a la cocina y afirme mi culo en la mesita para tomar agua como desesperada, recorde el carrete en el barsucho de bandera, las conversaciones, las criticas y los pelabres, como de a poco se fueron yendo y la salita media vacia se hiba llenando de cachondeo para unos y morbo para los demas, las caras deformes por el copete estaba felices satisfechas y yo tb en la cocina mientras buscaba algo que comer en el refri, hasta recorde mi terrible brindis. Como siempre llegue tarde a la junta, ya estaban todos sentaditos y la java ya estaba abierta, pregunte si habian echo el brindis correspondiente a la ultima junta como taller, dijeron q no y q yo hiciera uno - Uff por la boca muere el pez- todos de pie y dije algo asi como:
Hem hum… Bueno salud por el taller, que estuvo súper lindo, por lo menos para mi, y yo creo q para la mayoría. Conocimos distintos estilos y creo q fue muy enriquecedor para todos. Salud!... a los ojos a los ojos. Jajaja
Entre paya y no se que. Se notó q venía recién llegando y me faltaba llenar mis entrañas de ese elixir magico que te suelta la lengua y mas de una vez ha inspirado grandes obras. Como sea, así nació mi primer brindis sin pena ni gloria, en el sector VIP del Wonder Bar.
posted by Koré at 1:27 p. m.
3 Comments:
el brindis
ese brindis...ja!
yo creo que nadie podría haberlo dicho mejor, en realidad no creo que alguien haya podido decir algo, osea algo que sintetizara esos tres mese, en realidad no sé si fue lo novedoso o no sé qué, pero en el momento en que miras para que levanten los vasos todos movimos la cabeza en señal de complicidad con lo que habias dicho, además tb de buscar los ojos para brindar...
maldita resaca...
maldita cuando te interrumpe el sueño
ja
te cuidas!
yo que deje de tomar solo por las cañas, huyendo de ellas
Agua, mucha agua para rehidratar las meninges. Tiene su precio el alcohol pero a veces vale la pena pagarlo.
La urbe...algo la experimenté en mis tiempos de universitario en Valdivia. Por lo menos conocí un cine.
Saludos.
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